Toda la semana dándole vueltas al Rutón del Copón del fin de semana. Que si Senda del Genaro, que si la ruta del cocido en plan ilegal, que si una de sol y nieve por la Hoya de San Blas….opsss, esa me apetece. Me tira la nieve poderosamente. Creo que va impreso en mi código genético, así que , cuando oigo la palabra NIEVE, se me ponen las orejas tiesas y me quedo de muestra como un sabueso de caza. Esa última opción me pone.
Pero claro, entre que no veíamos mejoría física por un lado, y que el tiempo tampoco se estabilizaba, seguíamos indecisos sobre que hacer el domingo. Porque la idea de pasar otro fin de semana sin salida quedaba ab-so-lu-ta-men-te des-car-ta-do ! Y así pasaban los días, lunes, martes, miércoles… entre intercambios de whassaps (al más puro estilo Kamelias pero sin llegar a esas desaforadas cotas de mensajería ; ) las visitas a todas las páginas de previsión meteorológica y por supuestísimo, imponiendo el toque de queda casero en el momento en que Mónica acude a su cita diaria para contarnos como sólo ella sabe, el tiempo desde el telediarío de TVE1. Oigo risas?
Comienzo a impacientarme, no hay nada decidido aún, bueno si, una salida divertida el sábado por la Casa de Campo para crear afición. Pero y el domingo? Aún nada. Grrrrrr.
El jueves dice Mónica que habrá sol…palabra de Dios. Apuesto todo por la ruta en la sierra de Guadarrama. Intento conocer el estado de los caminos para saber si están cerrados. Llamo al departamento de Medio ambiente en el Ayuntamiento de Manzanares el Real y como si oyen llover. Puede sonar el teléfono una mañana entera que nadie lo coge. Buceo en internet y veo una página que alquila apartamentos y hacen excursiones por la zona…los llamo. Su dueño, muy atento, me dice que va a localizar a un amigo que sube mucho por la Hoya de San blas y que él me puede indicar el estado de los caminos. En ese instante se pone en marcha una cadena de whassaps de ciclistas que conocen ciclistas y guardas forestales, hasta que recibo el mensaje final….demoledor. No es aconsejable la subida porque a 1.500 m encontrarás al menos dos grandes tramos con mucho hielo y nieve y que sería aconsejable esperarme al menos una semana más. Se lo comunico a la cuadrilla y la diáspora es total. Unos están de hospitales, otros con gripe, otros de cumpleaños nocturnos, y otros se deciden por rutas de cota más baja. Yo soy cabezón y sigo en mis trece…qué cojones, mañana subo a la Hoya y punto!. Hago caso a mi desarrollado instinto arácnido y pongo el despertador a las 7:30 de la mañana.
A las 6:00 ya estaba despierto, sumido en un mar de dudas..voy..no voy…y si hay nieve y hielo y no puedo pasar? – – -Pues te das la vuelta- me respondía a mi mismo. Y si me doy una hostia con el hielo allá arriba, seguramente no haya nadie que pueda socorrerme.-Pues te convertirás en protagonista de tu propia película como Aron Lee Ralston y tendrás que amputarte algún brazo o pierna con tu navajilla y hacerte un torniquete con las bridas de la mochila…Y lobos..habrá? -Están extinguidos en la sierra madrileña, espabila!. A cada duda que me generaba, la vocecilla le daba una explicación de que todo estaba bajo control. Salto de la cama medio convencido de lo que iba a hacer y dispongo todo para irme. Reviso GPS, batería de móvil, agua y comida para la ruta, ruedas hinchadas, cadena lubricada, casco, gafas,guantes..etc… Me piro.
De camino, decido hacer la subida desde Soto del Real. La sierra luce un blanco precioso desde la autovía de Comelnar Viejo. Han vuelto a formarse las archiconocidas nubes Altocúmulos Lenticularis sobre las torres de Madrid a modo de platillos volantes. Ultimatum a la tierra, vuelvo a pensar al verlas. Soy predecible. La primera vez que las vi tuvimos un día perfecto. Esto pinta bien.
Llego a Soto, descargo mi querida Espe y la mochila. Me coloco los auriculares para amenizar la travesía. Mmmmm. empezamos con energía, suena el tema Buck Rogers de Feeder. No podía ser de otra manera con tanto ovni y naves espaciales, Buck Rogers, el héroe de la primera historieta de ciencia-ficción . Subo el volumen y vamos allá. Dejo la protección de las calles del pueblo siguiendo el track del GPS y de sopetón noto el viento helado en la cara. Coñooo q frío! Comienzo a rodar por senderos cuando me encuentro con otro lobo solitario que ha pinchado la rueda trasera. Me ofrezco a ayudarlo y cuando la reparamos decidimos hacer parte de la subida juntos, ya que él cree que no se puede llegar arriba y le esperan a comer en Colmenar Viejo. Me he quitado los auriculares para conversar mientras rodamos y me quitaría el gorro y la braga (con perdón) porque ahora con el esfuerzo empiezo a sentir demasiado calor. Llegamos hasta la bifurcación de la Cuerda Corta y la Cuerda Larga. Me insiste Ricardo, que así se llama, que no siga y que lo acompañe hacia Soto. Declino su invitación, ya que estoy allí… tiraré para arriba. Me como un sabroso plátano mientras veo como él se aleja bajando a toda pastilla y yo miro hacia arriba lo que me queda por subir. Joder que rabia me da ser tan testarudo en esos momentos. Foto, foto, foto y vuelvo a arrancar. Cada vez encuentro más tramos nevados. Algunos los voy sorteando por el lateral de la pista y otros me toca empujar. LLego a un recodo del camino donde pensaba llenar el bidón de agua, pero no veo la fuente que debe de estar bajo medio metro de nieve. Vuelven a asaltarme las dudas y la vocecita que las responde: Esto se va cerrando tío…no lo ves?….sigo..no sigo-sigue otro poco-..subo… no subo más..me doy la vuelta? -Vamos, ya no queda nada y es pronto aún-.
Me he colocado los auriculares de nuevo y no he sentido acercarse el grupo de 5 jóvenes endureros más locos que yo subiendo a todo trapo con sus cascos integrales y sus protecciones. Montan en sus Specialized Demo y Mondraker recorridos de 200 mm o más. Pepinos pepinos.
Me dicen que van hasta las Zetas y que se tirarán por ellas, aunque está prohibido. . Bueno- digo yo- ya me conozco esa bajada. Es cuestión de afrontar mejor que la vez anterior el escalón del final para no volver a salir de orejas y doblar el disco. Ejem ejem…error. Dije que eran jóvenes y estaban chiflaos? pues lo mantengo. La bajada por las Zetas se encuentra cubierta de nieve y el camino no es visible. Cuando llego al comienzo de la bajada ellos están ya 100 km más abajo derrapando y dando gritos de entusiasmo, mientras yo me paro y me quedo mirándolos muerto de envidia hasta que desaparecen en lo más profundo y hondo del bosque. cuando ya ni siquiera los oigo, salgo de mi hipnosis y me doy media vuelta, continuo por el trayecto inicial. Afronto una vez más un par de tramos cubiertos de nieve y hielo, de unos 200 metros no ciclables de empujabike y al final llego a mi destino. El Mirador de la Buitrera.
Y qué canción suena en mis auriculares mientras me asomo al balcón del mirador? Pues..In the Clouds de The Cult. No pueden darse más coincidencias, cosa que me encanta y en la que pienso un buen rato sentado al sol sobre las piedras admirando la amplitud del Hueco de San Blas. La canción forma parte del videoclip que he colocado al final de la crónica y habla de encontrar el Zen y encontrarte a ti mismo escalando montañas. Ya ves.
EN LAS NUBES
Libera tu mente y flota
Olvídate del tiempo y déjate llevar
La violencia del mundo vuelve a aumentar
Libérate, no pares de girar.
Sube una montaña para llegar a ti mismo.
Sube una montaña para encontrar el zen zen zen.
Oye… ¿Qué te hace pensar que está bien?
¿Está bien?
Date un paseo, siembra avena.
Ama a tus amigos y cuéntales un chiste.
Hay que establecer una conexión con Dios.
Es fácil, chicos,
pues hay amor, hay amor en las nubes.
En las nubes
Sube una montaña para llegar a ti mismo.
Sube una montaña para encontrar el zen zen zen
Oye… ¿Qué te hace pensar que está bien?
¿Está bien?
Libre libre libre libre….
Hasta aquí el momento ascético-místico. Tocaba regresar. Los tramos helados siguen siendo inciclables cuesta abajo, aunque alguno reconozco que lo he pasado por encima porque no me dio tiempo a frenar a tiempo, con susto incluído. Yiiiihaaa! El resto es una bajada muy rápida y continua hasta el centro de Soto, donde dejé aparcado el coche.
Bonito rutón. (si si, he dicho rutón a secas, porque Los Rutones del Copón los hago con mi amigo César y anda este con un «pequeño dolorcillo» en una pierna, en la espalda…etc, que le hace desear el arrancarse un par de tendones. Desde aquí, deseo que te recuperes lo antes y mejor posible)
Satisfecho una vez más por superar mis temores ante lo desconocido, por vencer mi pereza para saltar de la cama en una mañana fría y por mantener la difícil coherencia entre pensamiento y actos y porque me conozco mejor desde que subo montañas.
El tracka-track de la ruta
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8917800
Y el caramelito del vídeoclip para el que haya leído mi chapa hasta el final.
Puro MTB
Marter
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