Suelo vincular la música de los vídeos que edito con algún acontecimiento que haya ocurrido durante la ruta, o porque la letra contiene un mensaje que resulta apropiado para ese momento, porque el ritmo de la canción se adapta al de las imágenes o porque he encontrado un temazo de esos que me llegan tanto, que no puedo dejar de ponerlos vuelta y vuelta hasta la saciedad.
En esta ocasión, dos fueron los motivos anteriores que me decidieron a incluir los dos temas musicales de esta ruta.
El primero de ellos como curiosa coincidencia, al comprobar en el reverso de la carta de menús del Restaurante El Cancho del Águila, principio y fin de nuestra ruta, que allí habían grabado el videoclip de Fito &Fitipaldis (Antes de que cuente diez) y que en dicho vídeo aparecía tanto el restaurante como la mole de roca situada a sus espaldas llamada El pico de la Miel. También figuraba que allí se grabó una escena de Torrente, pero no viene a cuento incluirlo en esta crónica…amiguetes ; )
El segundo tema lo encontré por casualidad, como banda sonora en el vídeo de un biker alemán o suizo de ruta por los Alpes: El tema de Boneless Marshmallows titulado Shut up and drive, (que no es mal título para montar en bici. Cállate y conduce) Tiene un punto de Kings of Leon. Es uno de esos temas que al escucharlos por primera vez, ya se que me gustarán siempre y lógicamente me he descargado todo el álbum porque hay más joyas dentro que sin duda incluiré en próximos vídeos.
No es la primera vez que encuentro nuevas canciones y grupos de esta manera. Seguramente alguien que sigue este blog y que también gusta de incluir buena música en sus vídeos, se dará por aludido al leer esto. Así pues, gracias por mostrar tus rutas y también tu música. Es gratificante coincidir con gente con un gusto musical que no se limita a utilizar las pachangadas que suenan en las radio fórmula, o el más que manido tema de AC/DC – Thunderstruck y otros “éxitos contrastados”. Conste que soy fan de AC/DC desde que publicaron en España el Higway to hell en el año….de la pera.
Quizá alguien crea que me pongo muy exquisito con el tema musical y piense que lo que prima en estos vídeos son las imágenes, mientras que la música es secundaria, pero soy amante de ambas a partes iguales y por ese motivo siempre insisto que en la medida de lo posible, ver los vídeos en una pantalla grande, con los cascos bien encasquetados. Salvo que dispongas en casa de un maravilloso Home cinema surround system ; )
Pie de foto: “Cualquier parecido con la realidad es mera ilusión”
Vayamos al tema que nos ocupa. La ruta por La Cabrera.
Regreso un año más tarde al Cancho del Águila, punto de partida y final de trayecto. Hace frío, aunque es soportable e irá disminuyendo a lo largo de la mañana hasta coronar El Medio Celemín, donde quedamos expuestos al aire por los cuatro costados. Vimos varios grupos ciclistas esa mañana preparándose para salir, entre otros los de Mammoth, pero en esta ocasión llevan ritmo de color negro y dejamos que sigan su camino…ejem ejem..
Desde allí subimos, acompañados por el incesante rotor de un helicóptero que nos sobrevolaba incesantemente en trayectos de ida y vuelta. Ni idea de que estaba haciendo, pero no había ningún fuego que extinguir. Como decía, ascendimos por caminos de arena compacta, grandes lanchas de granito, estrechas trialeras y una fuerte rampa de cemento hasta el Monasterio de San Antonio y su mirador. Este es uno de los puntos desde donde se pueden disfrutar unas bonitas vistas de Madrid y la silueta de sus cuatro torres en lontananza. Tras recomponer la compostura, tomamos una larga, divertida y en ocasiones técnica y profunda trialera con profundos surcos y torrenteras, de unos tres kilómetros, hasta llegar a Valdemanco. Personalmente satisfecho por haber conseguido bajarla sin poner pie en tierra como la vez anterior. Algo hemos evolucionado en este tiempo.
Desde Valdemanco comienza la subida más larga de la jornada hasta coronar el Pico Medio Celemín 1.315 m., ancho y tendido, se abre entre el Mondalindo, a la izquierda, y el caos oriental de la Sierra de la Cabrera. Debe su nombre al peaje que debían de pagar por pasar desde la meseta castellana hasta el centro de la Península. Las vistas panorámicas de La Cabrera, el Valle del Lozoya y el Pantano del Atazar espectaculares en todo momento.
La bajada por pistas amplias y firme en buen estado..(casi siempre) con bonitas sorpresas en forma de senderos, arroyos y riachuelos hasta alcanzar la A-1. Desde allí trialeras técnicas de subida muy bonitas hasta cruzar la A-1 de nuevo para llegar al final del destino y tomar las cervezas de rigor en el Hostal El Cancho del Águila, donde encontramos caras conocidas de actores famosos de televisión, mientras dábamos buena cuenta de unas cervezas y un bocata. La nieve hizo acto de presencia a mitad de camino y algunos copos anunciaron lo que sería una copiosa nevada en zonas altas de la sierra. Llegó el invierno de golpe señores y apetece ruta con nieve.
En esta ocasión no retiré basura olvidada en los caminos, pero si quiero advertir que me encontré un sospechoso “brote” de tres grandes piedras colocadas estratégicamente en mitad del camino, a la altura de un lugar llamado Rocas Caprichosas en la zona de …Los Pajeros. No me preguntéis el porque de este nombre. Dichas piedras estaban separadas unos tres o cuatro metros entre sí y constituyen un verdadero peligro en sentido de bajada, por lo revirado del terreno y la velocidad que se alcanza debido a la inclinación . Retiré las tres piedras que encontré el domingo, alguna pesaba entre 10 o 12 kilos, pero sospecho que volverán a “brotar”nuevamente. Por favor, vamos a ser conscientes del daño irreparable que podemos ocasionar con estos actos homicidas. Unas piedras, unos clavos o un cable atado en medio de un camino no van a impedir que los ciclistas sigamos saliendo cada fin de semana a disfrutar de nuestra afición por la bici, la naturaleza y la montaña. Sin embargo si que supondrá el procesamiento de aquellos “tramperos ” que desprecien y pongan en peligro la vida de las personas. Vamos a tomar precauciones ante el riesgo que corremos mientras haya desaprensivos colocando obstáculos en mitad de caminos de uso público.
Pie de Foto: A estas rocas se las conoce por el nombre de Rocas Caprichosas. A pocos metros se encontraban colocadas “caprichosamente” otras piedras con malas intenciones.
El track en Wikiloc:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8227048
Las fotos en Flickr:
El vídeo en Vimeo:
Saludos bikernautas.
Marter
Que dientes más largos se me han puesto de ver el vídeo y las fotos.
Y yo ese día con catarro😩
La música muy bien elegida, socio😉
Un abrazo
Me gustaMe gusta
Gracias Nati. Se que hubiérais pasado un día divertido tu marido y tú por La Cabrera. Otro día será. Ciaoo
Me gustaMe gusta