E-Bikernautas

Saludos Bikernautas;

Pocas veces un nombre ha descrito con tanto acierto una ruta como el ascenso y descenso desde la Torrecilla hasta el Pontón de la Oliva.

Y no me refiero con esto a que alcanzar el collado de La Torrecilla se haga interminable.  A pesar de los casi 13 km. continuados de ascenso, son asequibles. Pista amplia, tendida sin grandes porcentajes y con buen firme.  Me refiero con esto a las rampas de sus bajadas, que dicho sea de paso, estas últimas fueron una gozada máxima. Pero estas rampas…se atragantan y te dejan un sabor agridulce tras unas golosas trialeras.

La ruta tiene tres partes bien diferenciadas.

La primera parte, la más «turística» sigue el curso contracorriente del Lozoya, por un precioso single track que comienza en la espectacular presa del Pontón de La Oliva y finaliza en la presa de la Parra. Muy recomendable, pero ojo que este camino tiene sus trampas  y alguno salió despedido de su bici. Un saludo Borja si estás leyendo esto.   Tras atravesar el río por unos cubos de granito habilitados para ello, comienza la subida hasta la Torrecilla.  Como todas las subidas, jode. Pero se deja hacer bien.

Reagrupamos y nos avituallamos a 1.475 m, frente al camino por el que bajaremos asalvajaos unos minutos más tarde. Wapísimo!

Esta sucesión de bajadas conforman la segunda parte de la ruta. El camino se desvía a la derecha de la pista y se introduce en un pinar. Hemos acertado con la fecha, puesto que aún hay rastros de la tremenda nevada que debió de caer aquí una semana antes. Bajada a todo trapo entre los pinares con el GPS colgando del manillar. Quién se para en un momento de éxtasis? Yo no. A medida que el pinar desaparece, Patones nos va mostrando sus relumbrantes y afilados colmillos. En ocasiones pierdo de vista el camino cegado por el brillo del sol sobre la pizarra. Reagrupamos por primera vez en el Collado del Portillo. Todos indemnes y las chicas bajan el  complicado tramo final con estilazo!

Arrancamos de nuevo entre afiladas losas y un paso que se atraganta se pasa al segundo intento. No dejo heridos a mis espaldas 🙂 A estas rapidísimas bajadas, le sigue una igual de veloz a media ladera, muy estrecha, jalonada de jaras unas veces y piedras la mayoría. Una sucesión de toboganes y subeybaja, nos dejan sin aliento en la parte alta de una trialera de piedra suelta con un porcentaje cercano al 50 %. Alguno se ha dejado llevar por la inercia y han tirado «to tieso»hasta que algunas jaras han frenado la gravedad de su ímpetu. A otros los hemos podido sujetar agarrádolos por el manillar. Las espectaculares tomas aéreas desde el dron dan una idea de la grandiosidad de estas montañas o de la pequeñez de quienes intentamos someterlas. Según se mire. Una fila de ciclistas empujan su bici ajenos al angulo de 90º que forma el camino por donde deben subir. Primer tercio de varas para restarnos bravura.Y lo consigue.

Mientras unos vamos llegando, otros se lanzan por la vertiente opuesta de la loma en cuestión. Un nuevo y veloz tramo que enlaza con la tercera parte de la ruta:

Reagrupamos y tras un breve descenso hasta el arroyo iniciamos el segundo puyazo de la tarde. El que nos deja definitvamente mansos. Y no será el último del día, aún queda uno más hasta llegar al punto de inicio. Para ser honestos, a cada tramo de subida lo acompañaba uno de bajada. Pero a esas alturas de la jornada…sólo pensábamos en beber lo que fuera. Para mi gusto demasiado esfuerzo para las bajadas que realmente merecen la pena, sin los repechos finales sería un bajadón.

Gracias Alberto, nos hizo de aguador desandando camino. Y qué caminos! Te dedico este vídeo. Espero que te guste.

Todas las fotos en Flickr:

https://flic.kr/s/aHsme61EwR

El track en Wikiloc:

https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/cerro-de-la-concha-22181501

El vídeo en Vimeo y Youtube:

Marter