E-Bikernautas

Saludos Bikernautas:

Gracias a Sergio, de UVES Bikes. Sin su freno, estaría ahora en el fondo de un barranco. Eres un mákina!

Hay rutas que se guardan en la saca de «rutas futuras» esperando el momento oportuno para llevarlas acabo. En ocasiones, estas se posponen debido a la climatología adversa, incompatibilidades de horarios, esperando los colores del otoño, la llegada de las nieves y todos aquellos fenómenos externos que consiguen que cada ruta sea…la mejor que hemos hecho hasta el momento! Una tras otra van quedando sepultadas por montones y montones de nuevas rutas que esperan pacientes su oportunidad, hasta que un buen día, aprovechando los colores de la primavera, esta emergió del fondo de la saca  y se convirtió, por todo cuanto hallamos en ella, en un Rutón de Cinemascope!

Puebla de Valles

Antes de partir es obligado admirar el fuerte contraste de las tierras desnudas, fuertemente rojizas, con las del conjunto adyacente, cubiertas por la vegetación, en especial la gigantesca cárcava que se alza majestuosa frente a la localidad. Los arroyos del Lugar y del Mego se unen para llegar juntos a Puebla de Valles. En medio dejan una V, cuya cresta supera mil metros: es la loma del Mego, con cárcavas arcillosas y muy bellas.
Un camino recorre entre pinos la loma desde la carretera de Tamajón y termina en lo alto de una carcava impresionante: es el Mirador del Mego. Vistas espectaculares de cárcavas, Puebla de Valles y las pequeñas Médulas.

Tras un ascenso de cinco Km. por los pinares, donde algún corzo puede salir al paso, comenzamos un pisteo fácil entre tierras de labranza, hasta encontrar la carretera que seguiremos.

Poco después la abandonaremos y siguiendo el arroyo de Sacedoncillo  nos acercaremos al poblado abandonado.

Sacedoncillo

Se encuentra entre Muriel y Tamajón. La aldea está compuesta por unas veinte edificaciones. Una vez nos adentramos en el pueblo, el paraje es desolador, ruinas y más ruinas, lo peor de todo es que la mayoría de estas no han sido provocadas por el paso del tiempo sino por la mano del hombre que en su afán de acaparar se han ido apropiando de todo lo que en su momento pudo tener algún valor sin respetar si tan siquiera la propia iglesia. De esta fue retirada la puerta de madera y algunos sillares de piedra para construir la iglesia nueva de Azuqueca de Henares allá por los albores de los 80. Aún con eso, la iglesia es la construcción algo mejor conservada, es una iglesia Románica que aún conserva una ventana de medio punto típica del románico.

Por lo demás, el pueblo nos dejará entrever la disposición de las calles, la fisonomía de sus casas trasladándonos a épocas donde por sus calles transitaban los lugareños.

A partir de aquí y una vez superado el pueblo, si seguimos por la cañada ancha, esta nos llevará hacia Tamajon. Continuando por esta senda no a mucha distancia llegaremos a la laguna de Tamajón o de Cantarranas.

Laguna de “Cantarranas”

Este entorno ha sido rehabilitado hace pocas fechas dentro del marco del Plan de Competitividad de la Arquitectura Negra, “recuperando el  paisaje de la laguna, convirtiéndolo en un activo turístico del  municipio. Este emplazamiento en el que se ubicaba el antiguo “alfar del pueblo”, derruido, se ha convertido en un mirador en el que además de ser un perfecto observatorio de aves, un perfecto lugar donde poder almorzar o pasar un descanso agradable con la compañía de aves y el frescor del agua.

Tamajón.  

Tamajón está asentado en una altiplanicie y es considerada como la puerta de entrada a la “Arquitectura negra” y capital de la sierra.

Fue fundada como “Tamaya” por los Judios en su dispersión en el siglo I d. C. Tras la Reconquista en el siglo XI, fue repoblado por monjes y adquirió estatus de Señorío.

Es destacable la intención que mantuvo Felipe II  de construir en esta localidad el Monasterio de San Lorenzo,  llevándoselo definitivamente a El Escorial.

Tamajón adquirió su mayor esplendor durante los siglos XVI y XVII, coincidiendo con el auge de la fábrica de vidrio.

Si continuamos nuestra visita, al final del pueblo nos encontraremos una iglesia románica del siglo XVI con su atrio porticado dedicada a la

Asunción de Nuestra Señora.

Esta Iglesia de origen románico conserva el muro sur original de construcción, en el cual aparecen canecillos del siglo XIII con representaciones zoomorfas y humanas, una galería porticada con arcos de medio punto con interesantes bóvedas de crucería construida en sillería caliza, la torre sufrió bastantes reformas en el siglo XVI, la más importante, la capilla de los Montúfar, con importantes tallas que se perdieron durante la guerra civil manteniendo actualmente la verja de separación siendo esta considerada una joya del barroco.

 

La Ciudad Encantada de Tamajón

Ha sido incluida en el «Inventario Nacional de Paisajes Sobresalientes». Se trata de una formación rocosa caliza con cuevas, oquedades en la roca, arcos de roca, dolinas y otras formaciones similares a los de la “Ciudad Encantada” de Cuenca. Hay un gran puente de roca, efectivamente, y unos contrastes llamativos en el color de las paredes: desde el gris perfecto, que parece recién pintado, hasta los dorados solemnes y los negros pizarrosos.

Un espectáculo de luz y silencio, una maravilla por caminos que atraviesan bosques y miran siempre a la altura del Ocejón y que nos depositan frente a :

Ermita de la Virgen de los Enebrales (Tamajón)

Es curioso reseñar la existencia de un edificio monumental, cargado de arte y leyenda, en medio de este bosque. A la orilla derecha de la carretera que conduce al pantano de El Vado y a Majaelrayo, se alza la ermita de Nuestra Señora de los Enebrales, patrona de Tamajón, a cuya imagen y devoción se han escrito también versos y endechas por los habituales vates de la mariología alcarreña. La ermita es realmente un templo grande, como de pueblo. Y en su portada luce el escudo, todavía polícromo, de los Mendoza de Tamajón, una rama secundaria nacida del tronco de los Infantado arriacenses. En el interior, tras la reja que protege al templo por la necesidad/costumbre de tener siempre abierta una hoja de la puerta, se ve la gran pintura mural que recuerda la aparición de la Virgen sobre una sabina al sacerdote don Diego Castro de San Félix

En una ocasión en que el cura de Tamajón iba con su mula al pueblo vecino de El Vado a decir misa, le atacó una gran serpiente, y al encomendarse a la Virgen, esta se le apareció sobre un enebro apaciguándola con su resplandor.

Tu ermita es apeadero camino del Ocejón; cuando la vé, el montañero, siempre reza una oración. A veces dicha plegaria, sin palabras se musita. Es sencilla, solitaria, como también es tu ermita. Virgen de los Enebrales, Tamajón o Campillejo, los humildes manantiales tienen un brillo de espejo.

Mi oración es serranilla de muy sencillo rimar pues los hijos de Castilla somos parcos en hablar. Cantueso, jara, tomillo, entre la nieve y el viento que parece un caramillo por lo agudo de su acento. Tu cancela siempre abierta, y abierto, tu corazón; ayuda pido en tu puerta, ¡pues es duro el Ocejón!

Una de las más populares hace referencia a que las puertas de esta Ermita han de estar siempre abiertas, aunque a día de hoy permanecen cerradas evitando el vandalismo y el saqueo.

» Virgen de los Enebrales
patrona de Tamajón
tienes las puertas abiertas
como si fueras un mesón»

 

A partir de aquí comienza el recorrido más visual  y espectacular de la jornada. Abandonamos la Ermita para atravesar un precioso bosque de sabinas, enebros y encinas. El camino se convierte en un sendero por encima del farallón calizo, saltando los muretes derruidos de las fincas hasta llegar una pista.

Aquí tomamos el «reacondicionado» GR-10. Siete km ininterrumpidos de bajada tendida por una amplia pista entre canteras, tapias y bosque. Atravesamos Retientas por debajo del puente  y repusimos agua en su fuente hasta llegar al cauce del río donde visitamos el monasterio.

 

Monasterio de Bonaval

En 1164, el rey Alfonso VIII de Castilla entregó el valle en que actualmente se asienta el monasterio a un grupo de monjes cistercienses para que lo habitasen velut precarium (de prestado), repoblaran la zona y sirvieran como barrera ante una posible invasión musulmana, aunque en estos tiempos la Reconquista había avanzado y las fronteras con los musulmanes estaba bastante lejos. En 1175, en el monasterio de Fitero, Alfonso VIII cedió totalmente Bonaval a la orden y determinó las posesiones del monasterio. Los primeros monjes vinieron del Monasterio de Santa María de Valbuena de Valladolid,  convirtiéndose poco a poco en un lugar donde los monjes más ancianos se preparaban para morir.  El monasterio no sufrió mucho en la guerra de la Independencia de España, por haber sido aquel territorio poco castigado por los franceses; pero no pudo aguantar, sin embargo, el trienio liberal que en 1821 con la desamortización de Mendizábal acabó con algunos antiguos monasterios, entre ellos el de Bonaval. Los monjes se retiraron a su casa madre, en Toledo, y el edificio fue vendido a particulares, que no se preocuparon de su conservación, viniendo a la ruina en la que se encuentra hoy. Su archivo se dispersó en su mayoría; sus libros, sus joyas, sus pertenencias más diversas cayeron en manos de anticuarios y oportunistas, y solamente algunas piezas artísticas pasaron a la parroquia de Retiendas, donde hoy se veneran. En el momento de escribir esta crónica, pudimos apreciar ciertos trabajos de reconstrucción del convento. Esperemos que al menos sirvan para que no continúe deteriorándose,  lo que supondría otra pérdida para nuestro patrimonio artístico secular.

Tras un breve recorrido circundando su vallado perímetro, proseguimos camino por una de las sorpresas más esperadas del día.

Las Hoces del Jarama

El bosque de encinas que nos ha acompañado desde Retiendas, se va haciendo cada vez más tupido a medida que avanzamos siguiendo el curso del Jarama, que nos queda abajo, en la hondonada. La sensación de frescor es reconfortante porque los rayos solares apenas consiguen penetrar entre la vegetación, lo que recrea a todo el entorno de un microclima especial.

El valle se va cerrando por momentos y el horizonte nos regala una vista hermosa. Un farallón de roca que nos recuerda a los barrancos del Alto Tajo y que parece cerrar nuestro camino. El bosque de encinas ha quedado atrás, pero no la sombra que, a esa hora de la mañana, se extiende mansamente por todo el cañón.

Más adelante la senda se empieza a empinar hasta llegar a una pradera que nos aleja temporalmente del cauce del Jarama, que pronto retomaremos sin perder el rectilíneo camino. La pradera nos lleva directamente al lecho de otro barranco, menos pronunciado que el anterior pero revirado y divertido. La senda sigue siendo cómoda y sólo hay un tramo final  donde hay que llevar cierto cuidado,  porque deja a nuestra derecha  un cortado de altura respetable. Al final del sendero nos encontraremos con la carretera entre Valdesotos y Tortuero. Tras unos metros  sobre ella, la abandonamos para adentrarnos de nuevo en el cañón, a la altura de la Almenara de Valdesotos y lo recorremos en sentido inverso, por el camino de las Vargas al Molino. Un extra-bonus de un kilómetro muy divertido y disfrutón, con el que nos obsequia Nano, conocedor de esta zona.

El precio a pagar será el empujabike que llega a continuación y que a esa hora del mediodía alcanza temperaturas de 36º. Tras este sofocante ascenso, un camino carretero nos conduce hasta Tortuero. Atravesamos el pueblo desierto a la hora de comer y reponemos agua en su fuente, donde nadan un buen número de truchas en su pilón. Pasado Tortuero, empieza otro de los platos fuertes de la ruta:

El Desfiladero de la Horca

Un largo sendero de 3 kilómetros, pedregoso y estrecho, va recorriendo el valle que traza el Arroyo de la Concha. Parada obligada para sacar alguna foto, aunque lo divertido es hacerlo del tirón porque es todo cuesta abajo. La última parte enlaza con 3 kilómetros ràpidos y agradecidos de carretera que  pican hacia abajo hasta llegar al desvío donde tendremos que vadear el Río Jarama.

Los últimos 7 Km. son de subida aunque tendida, pero el calor y lo que ya llevamos recorrido puede pasarnos factura.

El track en Wikiloc:

https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/puebla-de-valles-sacedoncillo-tamajon-cd-encantada-retientas-monasterio-d-bonaval-hoz-dl-jarama-tor-24985699

Las fotos de Flickr: Colaboración de Nano-

https://flic.kr/s/aHskyd9s6z

El vídeo en Youtube y Vimeo:

 

Marter