E-Bikernautas

No nos damos por vencidos, ni dejamos rutas incompletas.

La semana anterior la nieve y el viento reinante en Miraflores, nos hicieron retroceder en nuestro intento de llegar a Canencia y La chorrera de Mojonalvalle. El domingo regresamos, con la certeza de que sería un día espectacular y sin viento. Por si esto fuera poco, el día anterior,  exploramos  Mary y yo esta ruta en «modo senderista»,  para ver si la nieve acumulada en los caminos  supondría demasiado impedimento para rodar.

Una ruta para todos los gustos. Puede ser turística, puesto que discurre por carretera y pistas amplias, existen varias zonas de recreo a lo largo del camino, habilitadas para comer y descansar. Las vistas son espectaculares y el entorno fantástico para los amantes de la fotografía. Si a todo ello añadimos el aliciente de la nieve y los gratos recuerdos de la ruta nevada del año pasado, Paco, Julio y Nati, (que tendría por primera vez su bautismo blanco) saldrían más que satisfechos. También puede ser ruta de carretera, puesto que es una clásica en el mundo de los amantes de la flacas y así lo corrobora el grandísimo número de ciclistas que se encuentran a lo largo del puerto. Hay que extremar las precauciones para evitar accidentes. Mi tocayo habría optado por esta segunda opción, de no haber sufrido una ligera distensión en su mano que le impedía sujetar con fuerza el manillar de su bici. La tercera opción es, utilizando un símil culinario, un mestizaje de la primera y una bajada endurera, para dar un poco de chispa a la ruta. Así que aliñamos el sabroso guiso de la ruta de nieve y cascada de agua, con  la cayena picante del PR-10.1. Esta tercera opción será mi elección y la que me dejó más que satisfecho.

Tantas horas sobre la bici, tal variedad de entornos y paisajes, me han creado un verdadero problema a la hora de editar el vídeo que acompaña esta crónica. En realidad no debería llamarlo vídeo, sino  largometraje, por su duración, cerca de media hora. Nunca antes me había extendido tanto, pero en esta ocasión me ha resultado realmente doloroso cortar cualquiera de los fragmentos que, tanto Paco como yo habíamos grabado durante todo el día. Espero que no os resulte demasiado pesado, pero me ha parecido necesario mostrar «casi todo» lo que encontramos en esta ruta.

La crónica se resume en meros datos y nombres. Las imágenes describen perfectamente lo que contiene y no necesita ni prosa ni verso.

Subida tendida durante 8 Km. desde Miraflores hasta Canencia por carretera M-629, aunque hay posibilidad de hacerlo por pistas. Nosotros no  quisimos malgastar energías por lo que nos aguardaba más adelante.

Frente al Área de Recreo de la fuente de la Raja, tomamos la pista que sale a la izquierda hasta alcanzar el Centro de Educación ambiental. Aquí hay merenderos techados, fuente y preciosas vistas.

Rodeamos la edificación y tomamos la Senda de Malillo, un camino entre pinares, descendente y balizado, hasta alcanzar la cascada de Mojonavalle.

El camino de regreso lo hacemos por la senda principal, Senda del Arroyo del Sestil y ladera de Mojonavalle, también balizada y con bifurcaciones hacia un Tejo centenario y un ….abedul? Tras la subida, alcanzamos de nuevo la pista principal por la que ascendimos. La retomamos y bajamos ahora hasta el Área Recreativa, donde se encuentra la entrada del PR-10.1.

Mucho había investigado y preguntado durante este tiempo acerca del Pr-10.1, y todos coincidían en los mismos comentarios..-«Puffff» -«Es un PR»! -«No me gusta arriesgar» – «Si no te gustan las piedras mejor bajar por carretera y tomar la pista que conduce al helipuerto». – Sólo los más osados lo bajan sin poner pie a tierra..» etc…etc…

Pero es que…. Sí que me gustan las piedras! Y en concreto esas me encantaron! Y los senderos revirados y caminos tortuosos también, y cuando no hay sendero…entonces ya es el paraíso en la tierra ; ).

A modo de información, El PR-10.1 es ciclable. Un par de tramos un tanto complicados por la cantidad de piedras,  pueden aconsejarte prudencia si no lo ves claro. Pero para eso tienes dos piernas. En general, con un ritmo constante y vivo, se puede pasar montado.

El resto de la bajada es una gozada,  pasado el desvío de Bustarviejo, las trialeras unas veces se vuelven rápidas y otras veces toboganes muy divertidos.

Cuidado al cruzar el puente del Arroyo del Valle. Está roto y podéis llevaros algún susto. Claro que si optáis por vadearlo, recibiréis la visita de los cocodrilos. Verdad Paco?

El tramo final desde la estación de Miraflores hasta la plaza del pueblo, donde dejamos los coches, es lo peor de la ruta. Sobre todo el empedrado en la Calle de la Estación.

En resumen, Julio decidió comprarse allí una parcelita. Qué tal la espalda?  Nati se graduó en la nieve y los garden’s rocks, dominando la mente. Y Paco, tuvo agua,árboles, nieve, hielo,vistas,fotos, cocodrilos, …gozando desde el minuto uno.

Se puede decir que salió todo redondo.

El track enWikiloc:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=12553588

Las fotos en Flickr

https://flic.kr/s/aHskt7ybXx

El vídeo en Vimeo. (Este archivo supera la cuota semanal de mi cuenta en Vimeo y no me permite subirlo en resolución 1080 HD. Confío que 720 HD también os de una buena calidad de reproducción)

La música utilizada para aliñar las imágenes es :

–El Aprendiz de brujo, versión Fantasía Disney. Para ambientar la primera parte de la ruta con nieve.

–Depeche Mode:  A paint that I’m used. Una versión Remix de Jacques Lu.

–The Killers:  Mr. Brightside. Otra versión remix para continuar por la bajada.

–The XX:  Intro. Una paradoja llamándose así y siendo el tema que cierra el vídeo. ; )

Saludos Bikernautas

Marter